Los padecimientos de salud mental de la población panameña son un problema de salud pública que ha sido postergado, reconoció la ministra de Salud, Rosario Turner Montenegro, quien dijo que a través de su gestión se brindará la atención médica necesaria a estos pacientes.
Durante una visita al Instituto Nacional de Salud Mental (INSAM), la titular de la cartera expresó que son muchas las falencias encontradas en el nosocomio y entre las más preocupantes de ellas es la reducción en un 50% del personal que históricamente había tenido el instituto; además de las condiciones en que está la infraestructura.
Turner agregó que se harán las gestiones necesarias para dotar del recurso humano al INSAM, a través de mecanismos de autogestión e incluso buscará involucrar a la sociedad civil para mejorar la condición deplorable en las que se encuentra tan importante instalación.
Adicionalmente, la jefa de la cartera de Salud anunció que se creará una mesa de trabajo para analizar otras situaciones como el tema de transporte para los pacientes y administrativos; además de una agenda a corto plazo para mejorar la infraestructura y para la seguridad de áreas sensitivas del instituto.
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